Qué importante es la alimentación y qué poco la cuidamos.
Nos llevamos a la boca lo primero que nos quieren vender y nos creemos todo lo que nos dicen: infinidad de yogures que lo arreglan todo, comidas que prácticamente se cocinan solas, bebidas milagrosas...Y luego están lo que a mí me parecen "modas" o quizás "intereses económicos", me refiero a cuando en todas partes te recomiendan, cuando no casi te obligan -so pena de ser cuanto menos una mala madre si no se los das a tus hijos- a consumir alimentos que hace nada eran "malísimos " para la salud y ahora son "imprescindibles", o al contrario, lo que se ha comido toda la vida ahora resulta que era veneno.
Lo peor de todo, es que nada de lo que nos venden está libre de gran cantidad de productos tóxicos que consumimos desde que nacemos (colorantes, conservantes, aditivos, restos de pesticidas, metales pesados, alimentos modificados genéticamente...) sin contar cómo acabamos de contaminar los alimentos con los utensilios que utilizamos para cocinarlos o conservarlos (aluminio, teflón, plástico...)
Y ni siquiera nos preguntamos si lo que nos venden es seguro para nosotros por que lo hemos visto desde siempre, todo el mundo los consume y representa que hay alguien que vela por nuestra salud. ¿Y nos parece normal ver cada día más personas con alergias, intolerancias alimentarias, o cada vez más enfermos de cáncer, Alzheimer o SQM?
La parte positiva de padecer SQM es que mis ojos se han abierto de par en par. Simplemente ya no pueden engañarme más. En primer lugar por que mi cuerpo reacciona a cualquier tóxico, por lo tanto no puede colarse ninguno y, en segundo lugar, por que para poder mejorar he tenido que aprender a leer las etiquetas y conocer lo que como. Da miedo lo desinformados que estamos hasta que ya es demasiado tarde y debemos espabilar o enfermar gravemente.
RECOMENDACIONES PARA UNA ALIMENTACIÓN SALUDABLE
-DISTINGUIR ENTRE NATURAL, ECOLÓGICO Y ORGÁNICO O BIOLÓGICO. (*)
Alimento natural: no es otro que aquél que procede de la naturaleza. "Natural" es un concepto muy tergiversado que ha sido demasiado utilizado en productos de dudosa calidad que no respondían a lo que ofrecían y que escondían ingredientes.
Alimento ecológico: es el que ha sido producido de manera respetuosa con el medio ambiente,
utilizando recursos naturales renovables y fácilmente biodegradables y
que no generan residuos peligrosos.
Alimento orgánico o biológico: es el que en ninguna etapa de su producción ni elaboración han
intervenido fertilizantes, herbicidas, insecticidas, pesticidas,
aditivos, químicos, hidrocarburos o derivados, así como tampoco en los
suelos donde son cultivados los productos o las materias primas que
forman parte del producto. Desde la producción hasta la elaboración y
envasado, deben regirse bajo normas específicas de control con validez
legal, acreditada por un organismo autorizado. En su envase debe llevar
el sello que lo garantice.
NOTA:Esta clasificación se hace extensiva a cualquier producto, ya sean alimentos, productos de limpieza, cosméticos o téxtil.
Si bien los que consumimos productos biológicos ya sabemos esto, lo más habitual es que a la hora de hablar nos refiramos a ellos como productos ecológicos.
-APRENDER A LEER LAS ETIQUETAS.
Saber identificar los
aditivos, la mayoría de las veces innecesarios, que llevan los alimentos convencionales.
-CUIDADO CON EL PESCADO.
En el pescado es donde hay mayor concentración de metales pesados. Se debe consumir pescado pequeño o pescado en alta mar, mejor ultracongelado. El peor es el de costa y el de río. Muy contaminados son el atún, salmón, lucio, carpa y barbo.
También hay pescado ecológico, pero yo no lo he encontrado y parece ser que es bastante caro.
-ALIMENTOS MODIFICADOS GENÉTICAMENTE. (*)
No se informa de los riesgos reales de los transgénicos. Algunos de estos riesgos son:
-Hay plantas, como el maíz, que llevan insecticida incorporado, que se ingiere directamente.
-No se conoce su efecto a medio y largo plazo.
-Podría incrementar las reacciones alérgicas en los que los consumen.
-Hay una transferencia de material genético.
Interesante consultar la
Guía roja y verde de transgénicos de Greenpeace.
-AGUA Y BEBIDAS. (*)
Beber y cocinar solo con agua del grifo filtrada o agua envasada en vidrio. Evitar el agua envasada en plástico, ya que a los 10 días éste empieza a soltar residuos. Evitar bebidas y zumos en latas de aluminio y tetra brik.
-UTENSILIOS DE COCINA.
De poco sirve comer alimentos orgánicos si los cocinamos o conservamos en utensilios tóxicos, ya que los van a contaminar.
Debemos evitar el
plástico, especialmente el blando, ya que para fabricarlo se utilizan
ftalatos que están clasificados como posibles cancerígenos, y el
teflón, por ser un material plástico que a altas temperaturas desprende gases tóxicos. (*)
Sustituiremos las
sartenes con teflón por unas de
revestimiento cerámico. Para
hornear, lo mejor es el
vidrio y para las
ollas y cazuelas, el mejor material es el de
vitrocerámica, seguido del
acero inoxidable.
Para
conservar, congelar y envolver los alimentos se pueden usar
bolsas de celofán que no son tóxicas ya que es un material derivado de la celulosa, o
tarros y fiambreras de cristal. Evitar el papel de aliminio y de plástico transparente.
He encontrado
papel alimentario para hornear y envolver. Todavía no lo he probado pero creo que irá bien.
Cuando salimos, podemos llevar el agua en botellas de acero inoxidable o de cristal. Yo utilizo
esta.
Lo mejor a la hora de elegir los alimentos frescos, como frutas y verduras es intentar que sean lo más próximos posible, ya que así evitamos intermediarios y transporte por lo que también se reflejará en el precio.
Yo compro las frutas, verduras y legumbres en
l'Hort de la Carmeta. Tienen productos biológicos de temporada excelentes.
Podemos pensar que es caro consumir alimentos orgánicos o que nos dé pereza realizar tantos cambios o que sigamos llenando el carro de la compra sin mirar lo que nos llevamos realmente. Pero sé que es mejor hacerlo a tiempo, poco a poco, disfrutando de lo que vamos aprendiendo, a esperar a que sea demasiado tarde y tener que hacerlo a la fuerza y seguramente con la tolerancia alimentaria muy mermada ya.
(
*) Extraído de la "Guía práctica de control ambiental para afectados de Sensibilidad Química Múltiple." Lídia Monterde. Colaboración y revisión del Dr. Pablo Arnold. Septiembre del 2009.